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¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? Varios participantes individuales del taller presentaron 2 a las partes interesadas los motivos por los cuales deberÃan invertir en la infancia, no solo por el potencial de obtener altos beneficios, tanto económicos como psicosociales en el transcurso de la vida para el niño en particular, para las familias y para la sociedad, sino también por motivos basados en los derechos humanos. Los motivos se agrupan bajo los siguientes encabezados: La evidencia cientÃfica sugiere que las inversiones en la infancia influyen sobre el desarrollo posterior; Las inversiones en la infancia que vive en entornos de alto riesgo y en niños con discapacidades pueden cambiar el rumbo de muchas vidas; Las inversiones en la infancia, un marco basado en los derechos y los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas; Las inversiones en la familia, los cuidados institucionales y demás condiciones de vida precaria; Las inversiones en niños que viven en contextos socioeconómicos o polÃticos peligrosos e inestables equivalen a inversiones en derechos humanos; Scientific Evidence Suggests That Investments in Young Children May Influence Later Development La evidencia cientÃfica sugiere que las inversiones en la infancia pueden influir sobre el desarrollo posterior Los importantes avances en neurociencia, biologÃa molecular, genómica, psicologÃa, sociologÃa y otros campos han demostrado que las experiencias tempranas afectan el desarrollo de la arquitectura del cerebro, sentando las bases para el aprendizaje, la salud y el bienestar futuros (Huebner et ál., 2016). Los sistemas primarios, incluidos el aprendizaje y la memoria, la velocidad de procesamiento y la recompensa se desarrollan en los primeros 3 años de vida y aportan el âandamiajeâ para el posterior desarrollo de sistemas neurales de mayor orden, expresó Michael Georgieff, de la University of Minnesota, orador del taller (IOM y NRC, 2014). El cerebro consta de muchas áreas y tipos de células, cada una con una trayectoria de desarrollo diferente. Algunas áreas comienzan y terminan el desarrollo durante el perÃodo fetal, mientras que otras siguen desarrollándose incluso durante toda la adolescencia. Hizo énfasis en que el primer desarrollo (desde el perÃodo prenatal hasta los 5 años) afecta el desarrollo de estructuras cerebrales primarias y que es difÃcil compensar este desarrollo posteriormente en la vida. 6
SLOVAKIA 2 ¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? COLOMBIA Por lo tanto, alinear el momento y la coordinación de las intervenciones basándose en los perÃodos sensibles del desarrollo es particularmente eficaz, en especial en entornos de recursos limitados, dijo Georgieff. Donald Bundy, del Banco Mundial, indicó que la comunidad de desarrollo infantil debe tener en cuenta a los niños de manera más amplia, ya que la adolescencia también es un perÃodo crÃtico que se caracteriza por un sustancial desarrollo fÃsico, cognitivo, emocional y social (IOM y NRC, 2014). Las inversiones en la adolescencia pueden sostener los beneficios de las inversiones anteriores en el ciclo de la vida. De hecho, agregó que la educación puede cambiar la arquitectura del cerebro y varios años de educación básica permiten a las personas pensar y razonar de manera diferente. Georgieff reconoció que la adolescencia ofrece una oportunidad de âponerse al dÃaâ y solidificar el andamiaje que se armó durante la infancia, lo que hace que sean fundamentales las intervenciones de seguimiento, en especial para los niños con varios factores de riesgo. Las inversiones en la infancia se pueden vincular con las inversiones en las sociedades La investigación resaltada en los talleres apunta a los primeros años de la vida de un niño como fundamentales para impulsar el desarrollo cognitivo, social y emocional y sentar las bases para la salud y el bienestar de toda la vida (IOM y NRC, 2014; NASEM, 2016b). Günther Fink de la Facultad de Salud Pública T.H. Chan de Harvard y Norbert Schady del Banco Interamericano de Desarrollo indicaron que la inversión temprana en el desarrollo infantil dispara un efecto multiplicador con resultados positivos que se propagan por múltiples sectores a largo plazo (IOM y NRC, 2014; NASEM, 2016b). Por ejemplo, el mayor acceso a programas de desarrollo de la primera infancia puede aumentar la igualdad de oportunidades y reducir la desigualdad de logros al aumentar el conjunto de destrezas tempranas de los niños (capital humano) y su capacidad de rendir bien en la escuela y a nivel profesional. Paul Gertler, de la University of California, Berkeley, habló acerca de la productividad económica de estos niños cuando se conviertan en adultos como algo representativo de un alto nivel de rentabilidad sobre las inversiones tempranas en la infancia, y Parfait Eloundou-Enyegue de la Cornell University también habló sobre cómo pueden estas mejoras afectar a generaciones posteriores (IOM y NRC, 2014). Tal como señaló Peter Singer, de Grand Challenges Canada, tenemos la capacidad de transformar las sociedades de manera positiva conectando lo que se conoce sobre la inversión en los niños y sus cuidadores con lo que se está haciendo (IOM y NRC, 2014). No brindar a los niños entornos óptimos durante su primera infancia derivará en menores ingresos y un producto interno bruto más bajo, Ãndices más altos de enfermedad y depresión y mayores Ãndices de delincuencia, añadió. Según la opinión de Singer (IOM y NRC, 2014), la desatención del desarrollo de la primera infancia condena a los paÃses a una condición de pobreza. Además, Singer indicó que la neurobiologÃa del desarrollo cerebral sugiere que es más fácil, eficiente y económico propiciar comienzos sólidos en comparación con la facilitación de reparaciones más adelante en el transcurso de la vida. Según Gertler, las intervenciones tempranas dirigidas a niños menores de 2 o 3 años podrÃan ser de particular eficacia para el combate del potencial perdido, porque pueden tener un Ãndice más elevado de rentabilidad al mejorar el futuro desarrollo de un niño, reduciendo la necesidad de costosos servicios de rehabilitación más adelante en el transcurso de la vida (IOM y NRC, 2014). 7
SLOVAKIA 2 ¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? COLOMBIA Schady añadió que las inversiones constantes hasta los 8 años de edad, o hasta el comienzo de la escuela primaria, aprovechan las inversiones tempranas para seguir apoyando a los niños en un camino de desarrollo saludable (IOM y NRC, 2014). Gary Darmstadt de la Facultad de Medicina de la Stanford University y Zulfiqar Bhutta del SickKids Centre for Global Child Health y la Aga Khan University reportaron que 249 millones de niños corren riesgo de no alcanzar su potencial de desarrollo debido a deficiencias del crecimiento o a la exposición a la pobreza (Lu et ál., 2016; NASEM, 2016c). Si los niños que viven en la pobreza extrema y están mal desarrollados se convierten en adultos menos capaces de participar en la economÃa, experimentarán una disminución de la calidad de vida y los paÃses perderán gran parte de su potencial de crecimiento económico, manifestó Gertler (IOM y NRC, 2014). Por consiguiente, las inversiones en la infancia y en el desarrollo infantil pueden mejorar las habilidades futuras en el mercado laboral, lo que mejora los resultados económicos a largo plazo, añadió Gertler (IOM y NRC, 2014). Las inversiones en la infancia que vive en entornos de alto riesgo y en niños con discapacidades pueden cambiar el rumbo de muchas vidas La biologÃa de la adversidad y la resiliencia demuestra que los factores de estrés importantes, que comienzan en el útero y siguen durante los primeros años de vida, pueden causar efectos duraderos en la arquitectura y la función del cerebro (Shonkoff et ál., 2012). Afortunadamente, los comienzos comprometidos pueden revertirse. Los niños pueden lograr la resiliencia cuando los factores de protección, en particular una relación estable y comprometida con un padre, una madre, un cuidador u otro adulto que brinde apoyo, superen a los demás riesgos, según Ann Masten de la University of Minnesota (NASEM, 2016d). Masten explicó que la resiliencia de un niño depende de la resiliencia de los sistemas que apoyan a ese niño y para construir la resiliencia es necesario que exista un andamiaje en diferentes niveles, de modo que incluso cuando los sistemas de apoyo colapsan, como sucede con frecuencia durante los desastres y tiempos de crisis, el cuidador principal tenga la capacidad de reorganizarse y reconectarse con el niño para continuar apoyando su desarrollo (NASEM, 2016d). De hecho en todos los contextos, promover la salud y el desarrollo de niños vulnerables requiere apoyar la capacidad del cuidador para responder adecuadamente a los niños necesitados o en dificultades, de acuerdo con Vibha Krishnamurthy de Ummeed Child Development Center (NASEM, 2016c). Las influencias sociales sobre la salud, el crecimiento y el desarrollo de un niño trascienden varios contextos ecológicos más allá del cuidador. Como lo establecieron varios oradores del taller, las necesidades y riesgos de los niños son multidimensionales, y encargarse de un aspecto por vez no es eficaz. De acuerdo con Pia Rebello Britto de UNICEF (UN International Childrenâs Emergency Fund) y Lorraine Sherr de University College London, evaluar los riesgos de los niños que viven en entornos de bajos recursos es complejo e implica tener en cuenta los factores sociales, la polÃtica, las caracterÃsticas demográficas de la población, la religión, la cultura y los marcos legales (IOM y NRC, 2015a). Por lo tanto, es importante abordar los riegos en múltiples niveles para lograr hacer una diferencia en la promoción de la salud y el bienestar infantil. 8
SLOVAKIA 2 ¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? COLOMBIA En determinadas circunstancias, como señaló Margareta Matache de la Harvard University, los niños están expuestos a una acumulación de factores de riesgo que afectan negativamente el desarrollo temprano y aportan a las desigualdades (NASEM, 2016c). Por ejemplo, al negárseles los servicios básicos y estar sujetos a desalojos forzados, Matache afirma que los niños de Roma pueden presentar altos niveles de trauma que afecten su desarrollo emocional, cognitivo y social en la infancia y más tarde en la vida. Además, en Chile, un 30 % de los niños que viven en situación de pobreza fueron identificados como con un retraso del desarrollo, según Helia Molina de la Universidad de Santiago de Chile, en oposición a menos del 15 % de los niños que viven en entornos de mayores ingresos (NASEM, 2015). Amina Abubakar de Kenya Medical Research Institute/Wellcome Trust Research Programme demostró que los niños que viven en comunidades con una alta prevalencia de VIH también están sujetos a una acumulación de riesgos, ya que están expuestos a estrés crónico, quedan retrasados en los logros de los hitos del desarrollo y tienden a experimentar problemas de salud mental (Abubakar et ál., 2008; Devendra et ál., 2013; Kamau et ál., 2012). Quentin Wodon del Banco Mundial indicó que algunos de los niños más vulnerables nacen de chicas que contraen matrimonio antes de los 18 años (NASEM, 2016d). Jeffrey Edmeades del International Center for Research on Women explicó que una razón para que esto suceda es que el matrimonio temprano a menudo significa el final de la educación formal (NASEM, 2016d; Stoebenau et ál., 2015; UNICEF, 2014; Warner et ál., 2014) y el comienzo de la actividad sexual y los embarazos, lo que introduce otros problemas de salud fÃsica y mental (Nour, 2009; Plan UK, 2011; UNFPA, 2012). Esto afecta directamente la participación de las niñas en la población activa, el nivel de educación, la participación en la toma de decisiones, la exposición a la violencia, y la salud, dijo Wodon. Los hijos de mujeres muy jóvenes pueden a su vez volverse susceptibles a sufrir problemas de salud y de desarrollo y a la pobreza (Duvvury et ál., 2013; Parsons et ál., 2015). Varios oradores presentaron soluciones que pueden apoyar a las jóvenes adolescentes y a sus hijos. Wodon enfatizó que es fundamental trabajar para el cambio en los sistemas, incluso alterar los mercados de matrimonio locales y los roles de género, y a la vez empoderar a las chicas adolescentes y a sus familias para encontrar alternativas más allá de contraer matrimonio a una edad temprana (NASEM, 2016d). Estudios realizados en varios paÃses han demostrado que aumentar el acceso a la financiación y disminuir las barreas para la educación intermedia y secundaria para las niñas aumenta la asistencia y disminuye las tasas de matrimonio precoz (Baird, 2012; Duflo et ál., 2015; Hallfors et ál., 2015; Kalamar et ál., 2016; Malhotra et ál., 2011). En la ciudad de Nueva York, Angela Diaz y sus colegas en Mount Sinai Adolescent Health Center trabajan Ãntimamente con padres adolescentes y sus hijos para proporcionar servicios a fin de evitar más embarazos y asegurar que los hijos estén en una trayectoria de desarrollo positivo (NASEM, 2015). Afzal Habib de Kidogo enfatizó que los programas de educación y atención infantil de alta calidad como Kidogo en las poblaciones informales de Nairobi, Kenia, pueden desarrollar una base para la igualdad y ser un trampolÃn para salir de la pobreza (NASEM, 2016d). Estos programas les ofrecen a los niños un inicio sólido y la oportunidad de alcanzar su total potencial de desarrollo para cuando alcancen la edad de tener hijos, lo que puede ayudar a interrumpir el ciclo vicioso de privación intergeneracional, afirmó Gillian Mellsop de UNICEF (NASEM, 2016d). Además, varios oradores hicieron hincapié en que invertir en los niños con discapacidades puede apoyar su inclusión total en la sociedad (NASEM, 2015). De acuerdo con Vesna Kutlesic de Eunice Kennedy Shriver 9
SLOVAKIA 2 ¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? COLOMBIA National Institute of Child Health and Human Development, sin los apoyos adecuados, los niños con discapacidades son especialmente vulnerables y están en riesgo de no lograr su máximo potencial de desarrollo (NASEM, 2016c). Lo que es más, varios participantes observaron que estos niños a menudo son objeto de descuido y están sobrerrepresentados en las cifras entre las secciones más pobres de la sociedad (NASEM, 2015). Otro factor de riesgo es que el acceso a la educación a menudo se ve obstaculizado para los niños con retrasos y discapacidades del desarrollo, indicó Andy Shih de Autism Speaks (NASEM, 2016c). Como lo describió Shih (NASEM, 2016c), si bien muchos paÃses tienen escritas leyes y polÃticas inclusivas, en la práctica, los niños con retrasos en el desarrollo, trastornos conductuales o discapacidades a menudo son excluidos de la enseñanza general. Lo que es más, muchos paÃses no se han comprometido con los derechos igualitarios y la educación inclusiva para los niños con discapacidades (Raub, 2016) De acuerdo con Donald Wertlieb de Partnership for Early Childhood Development and Disability Rights (NASEM, 2016c), los niños con retrasos en el desarrollo y discapacidades representan entre un 5 y un 25 % de la población de un paÃs, y se les debe incluir en forma más prominente en los esfuerzos globales de construir sociedades prósperas y saludables. El primer paso hacia la inclusión es trasladar la educación para niños con discapacidades de la educación especial a la educación inclusiva, explicó Yasmin Hussain de Southeast Asian Ministers of Education Organization (NASEM, 2015), con la consciencia de que las escuelas especiales para los discapacitados refuerzan la segregación y la marginalización (Tsaputra, 2012). Las inversiones en la infancia, un marco basado en los derechos y los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas Publicado en 2015, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030 (ODS de la ONU) van más allá de la supervivencia para asegurar que los niños prosperen (ONU, 2015). Los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas se incluyeron en muchos debates de talleres y se alinean bien con las áreas de enfoque del foro. Las comunidades de investigación y práctica están ahora concentradas en la sostenibilidad, el desarrollo humano holÃstico, y los numerosos factores que afectan la salud y el bienestar, dijo Bhutta (NASEM, 2016c). Singer alentó a los participantes del taller a aprovechar este impulso, y a los investigadores, los creadores de polÃticas y los practicantes a que promuevan el âflorecimiento infantilâ (IOM y NRC, 2014). Los derechos humanos, los derechos de los niños y los derechos de las personas con discapacidades se presentaron como plataformas poderosas para presentar el caso para invertir en la infancia. Jonathan Todres de Georgia State University proporcionó una visión general de alto nivel sobre cómo se interrelacionan los derechos de los niños a la salud, la educación, la nutrición y la protección social (NASEM, 2016c). Ziba Vaghri de University of British Columbia (IOM y NRC, 2014) demostró que las convenciones y tratados internacionales sobre derechos humanos pueden ser plataformas para hacer hincapié en los derechos de los niños a la salud y la seguridad como una obligación del gobierno de apoyar a los niños (OHCHR, 2014; ONU, 2014). También mencionó la posibilidad de tener un marco de trabajo internacional para proteger los derechos de los niños a través del monitoreo y el seguimiento de los progresos (IOM y NRC, 2014). Los presentadores del taller Maureen Durkin de University of Wisconsin 10
SLOVAKIA 2 ¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? COLOMBIA y Wertlieb ambos destacaron tendencias en acuerdos globales en pos del reconocimiento de los derechos humanos de las personas con discapacidades en lugar de como sujetos de caridad y exhortaron a una mayor inclusión de los niños con discapacidades en la investigación y la creación de polÃticas con respecto al desarrollo en la primera infancia (IOM y NRC, 2014; NASEM, 2016c). Inversiones en familias, cuidados institucionales y demás condiciones de vida precaria Los huérfanos o los niños que viven fuera del cuidado familiar son vulnerables de forma similar, dijo Kutlesic (NASEM, 2016c). Los niños migrantes sin acompañamiento que han sido separados de sus padres tienen mayores probabilidades de sufrir violencia sexual y tráfico humano; falta de acceso a alimentos, agua, refugio y educación; y son objetivo de pandillas, según Alison Parker de Human Rights Watch (NASEM, 2016c). Parker subrayó que a menudo estos niños temen por sus vidas. En muchos casos, las familias de bajos recursos que no pueden cuidar de sus propios hijos o que tienen un alto nivel de disfunción podrÃan no estar en condiciones de cuidar adecuadamente de sus hijos y enviarlos a vivir con otras familias. En casos extremos, los niños podrÃan ser explotados para actividades ilegales (p. ej., mano de obra infantil, tráfico de drogas, prostitución) o terminar con cuidadores que abusan de ellos fÃsica o sexualmente y convertirse en esclavos infantiles conocidos como restaveks en HaitÃ. Este es el caso de muchos niños haitianos, especialmente niñas, según Joan Conn de la Fundación Restavek Freedom (NASEM, 2016d). Oradores individuales indicaron que en otras instancias, una combinación de pobreza, disfunción familiar o el retraso o discapacidad de un niño (y la ausencia de servicios de la comunidad) podrÃa llevar a las familias a colocar a sus hijos en cuidados residenciales (NASEM, 2016b,d). Como lo presentó Kevin Browne de Nottingham University, la institucionalización de los niños puede afectar negativamente la conducta social de un niño, la interacción con otros y los apegos emocionales (NASEM, 2016c). Agregó que la institucionalización se asociaba con un desempeño cognitivo insuficiente y déficits en el lenguaje en algunos niños. Kutlesic explicó que cuidar niños que son separados de sus familias presenta un problema complejo que requiere soluciones basadas en la evidencia, una atención continuada, y colocaciones en familias u otras alternativas para los niños con un diverso conjunto de necesidades sanitarias, educativas y psicosociales (NASEM, 2016c). Las investigaciones han demostrado que la calidad de los cuidados proporcionados es fundamental sin importar la situación de vida (p. ej., atención basada en la familia o institucional) con un objetivo principal de ser una protección para los niños contra el trauma y los abusos (Gray et ál., 2015; Whetten et ál., 2014). Si bien mantener a los niños en familias que funcionan bien es la situación de vida preferida siempre que sea posible, para los niños para quienes las colocaciones en familias no está disponible, las colocaciones a corto plazo en centros residenciales bien dirigidos que son pequeños e incluyen programas educativos de calidad y personal bien capacitado y atento pueden facilitar resultados de desarrollo positivos para estos niños, indicó Kutlesic (NASEM, 2016c). Sin embargo, el fortalecimiento de las familias y el desarrollo de los servicios comunitarios cuando no están disponibles en contextos locales es esencial para ir más allá de la supervivencia infantil y asegurar que todos los niños prosperen (Huebner et ál., 2016). 11
SLOVAKIA 2 ¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? COLOMBIA Las inversiones en niños que viven en contextos socioeconómicos o polÃticos peligrosos e inestables pueden equivaler a inversiones en derechos humanos En muchas regiones del mundo, la mano de obra infantil es un asunto que prevalece entre las comunidades vulnerables. Como lo presentó Parker, muchos niños migrantes, incluso de 7 años de edad, de Centroamérica y México que viven ahora en los Estados Unidos reportan haber trabajado en granjas (NASEM, 2016c). Esta carga los ha llevado a abandonar la escuela, sufrir lesiones debido al equipo de la granja, soportar abuso fÃsico y sufrir efectos de la exposición a pesticidas. Los programas como CocoaAction en Costa de Marfil y Ghana, presentados por Bill Guyton de la World Cocoa Foundation, apuntan a intervenir y asegurar la sostenibilidad al proporcionar âpaquetes de productividadâ a los productores de cacao, que incluyen capacitación, nuevo material y fertilizantes para plantar y buenas prácticas agrÃcolas, conjuntamente con inversiones coordinadas en desarrollo comunitario en las áreas de educación primaria, mano de obra infantil y empoderamiento de las mujeres (NASEM, 2016d). Según Guyton, el resultado redunda en familias más fuertes (NASEM, 2016d). Los conflictos armados son una barrera importante para el bienestar de los niños según lo afirmó Maysoun Chehab de la UNESCO (IOM y NRC, 2014). La cantidad de personas desplazadas a la fuerza en el mundo actualmente es la más alta desde la Segunda Guerra Mundial, dijo Eskinder Negash del U.S. Committee for Refugees and Immigrants y Mohannad Al-Nsour de la Eastern Mediterranean Public Health Network (NASEM, 2016a,c), al citar los 59.5 millones de personas desplazadas en 2014. Al-Nsour agregó que más del 50 % de los refugiados sirios desplazados en el Medio Oriente son niños. Según Chehab, como consecuencia del conflicto y el desplazamiento, las condiciones de vida de los niños se deterioran y los cuidadores dejan de enviar a los niños a la escuela por motivos de seguridad. Agregó que las escuelas pueden convertirse en objetivos de reclutamiento de niños soldado, agravando el temor que tienen los cuidadores de mandar a sus hijos fuera del hogar, a pesar de que comprenden los beneficios de la educación. Por tanto, las situaciones de crisis no solo alteran la escolaridad sino alteran también potencialmente los sistemas de salud y protección. Los sistemas de salud en épocas de crisis se sobrecargan con pacientes, lo que provoca una sobrecarga de trabajo para los trabajadores sanitarios y escasez de medicamentos y equipos vitales, indicó Al-Nsour (NASEM, 2016a). Negash y Jan Peeters de Ghent University enfatizaron ambos que las partes interesadas deben asegurar la protección de estos niños vulnerables y que los servicios de primera infancia deben ser accesibles y asequibles para las familias desplazadas porque de lo contrario, el desarrollo de los circuitos cerebrales puede verse afectado negativamente como resultado de este entorno violento, lo que lleva a consecuencias negativas de por vida para estos niños (NASEM, 2016c). Masten indicó que si bien no hay suficiente investigación de intervención sobre qué es lo que funciona mejor para los niños en diferentes clases de situaciones de conflicto, existe una creciente cantidad de trabajo enfocada en comprender las conexiones entre la resiliencia mostrada entre los niños individuales y sus familias, su comunidad y la sociedad como sistemas (NASEM, 2016a). Acreditó estas nuevas áreas de investigación con una mejor alineación entre los sistemas antemencionados que apoyan la infancia (NASEM, 2016a). 12
SLOVAKIA 2 ¿POR QUà DEBERÃAN INVERTIR EN LA INFANCIA LAS PARTES INTERESADAS? COLOMBIA Las inversiones en el desarrollo infantil, incluidas las herramientas y apoyos que necesitan para desarrollarse en individuos saludables y prósperos, también promueven la resiliencia de las sociedades futuras, afirmó. Si bien Masten reconoció una gran cantidad de investigación emergente sobre los niños que viven en conflictos, también ofreció tres pautas de acción para prácticas mejoradas: 1. Definir la función de los primeros en responder, incluidos aquellos más allá del personal de emergencia, como por ejemplo los educadores y los padres. 2. Restaurar un sentido de normalidad para los niños y las familias. 3. Promover un entorno para el desarrollo saludable, pero hacer esto reconociendo las barreras conductuales incluidas la discriminación, la desigualdad y el reclutamiento a la violencia. 13